Agujas de acupuntura
Mucha gente siente aprensión por las agujas, y cuando se le habla de probar acupuntura responden rápidamente: “Yo las agujas no las puedo ni ver!”
Podría ser que el miedo viene del desconocimiento? Si es así, conocer un poco más puede ayudar a vencer el miedo.
Estas son la herramienta principal de un acupuntor: Las agujas
El material
El material de las agujas de acupuntura es generalmente acero inoxidable, por lo que permite a la aguja tener una gran flexibilidad mientras que se evita su rotura. Hay historias de acupuntures a quienes se le rompen las agujas quedando estas dentro del paciente. En tiempos antiguos, se dice que la acupuntura se practicaba con objetos punzantes, como restos de huesos o espinas de pescado. En la actualidad no hay necesidad de eso, y se puede confiar plenamente en la calidad de las agujas modernas.
La longitud y el grosor
Pueden variar ampliamente. La longitud puede ser desde unos pocos milímetros, como las usadas en acupuntura de mano, hasta uno o más decímetros, para pacientes muy voluminosos o recorridos subcutáneos. Habitualmente, lo más habitual es usar agujas de 2,5 o 3 centímetros.
El grosor de las agujas también puede variar significativamente. Hay agujas que pueden ser finas como un cabello humano, como unos 0.16 mm de diámetro, mientras que hay gruesas de más de 0.40mm.
El momento de la inserción suele ser el momento más intenso para aquellos más aprensivos. Nervios y muchos sudores preceden a la primera aguja. Después… alivio. No era para tanto!